domingo, 18 de noviembre de 2018

1997: Castlevania: Symphony of the Night

En esta entrada quiero hablar de uno de mis videojuegos predilectos desde que soy vicioso del las consolas. Castlevania: Symphony of the Night es el juego que considero mi primer lugar de mis preferidos de esta saga.

https://www.etsy.com/listing/589148698/castlevania-symphony-of-the-night-e3
Conocí este juego en PlayStation pirata, gracias al hermano del Chacal, quien me lo prestó y con ello me confinó a la consola por varias semanas sin parar. Como pocas veces, me enganché a este juego día y noche (incluyendo madrugadas), hasta que le exprimí todo lo que era posible exprimirle. Es más, me la pasé tanto tiempo jugándolo que recuerdo haberlo terminado por primera vez por la madrugada (habrán sido las 4 o las 5). Luego me enteraría  que sólo había terminado la mitad del juego.

 



Por ello, aquí les comparto una lista de reazones por las que pasé horas y horas ante esta obra de arte.

El estilo. Los juegos de platafomas son uno de mis géneros favoritos, y SOTN es un juego de plataformas muy bien realizado. Pero no sólo eso. Este juego en particular es considerado como uno de los que estrenaron el estilo metroidvania, que consiste en explorar un mapa y adquirir nuevas habilidades para acceder a nuevas áreas del mapa antes inalcanzables. Desde entonces no pierdo la oportunidad de conocer nuevos juegos de este estilo.

Metroidvania...
Los elementos RPG. Este juego es el primero de la saga que se requiere subir el nivel del personaje y equiparlo con distintos items. Los RPG son un género en el que me estrené con el fantástico Chrono Trigger y me encantó. Así que esté juego terminó por fortalecer ese gusto. Sobre todo por la gran cantidad de items que se pueden obtener, muchos honestamente medio inútiles, pero significaron una enorme motivación para pasar horas con la consola.


La variedad de enemigos. Un juego tan masivo no podría sostenerse sin una buena variedad de enemigos. Cada área del enorme castillo de drácula tiene una muy interesante cantidad de enemigos, que van desde los típicos esqueletos y murciélagos  hasta los poderosos minotauros, y cerrando con los  imponentes jefes de dos pantallas de tamaño, como Galamoth o el perturbador Beelzebub.





A que impone...
La música. Una de los mejores soundtracks de videjuegos. Para esta consola ya no valían tanto los logros MIDI de la generación de consolas precedente. Aquí cada escenario del castillo tiene temas orquestales impresionantes que acompañan muy bien el tono del juego. Aquí un par de ejemplos.




Y al final, una balada pop, que a pesar de no encajar con el tono mencionado, constituía una novedad.


La historia. Si bien, los juegos de Castlevania no se distinguían mucho por su historia, este juego tiene algunos intercambios entre presonajes y enemigos que hacen más interesante la misión de Alucard. Uno de los puntos más interesantes, a mi gusto, es el intercambio entre Alucard y Succubus. Recuerdo que inclusó memoricé el intercambio inicial entre Alucard y Death.


Los gráficos. La tercer generación de videoconsolas estuvo dominada por los gráficos poligonales en 3D. Yo no logré animarme mucho al principio con este estilo, sobre todo porque en fotos, los juegos se veían de veras muy mal, con una paleta de colores muy limitada. Así que SOTN captó mi atención de inmediato con su estilo 2D y lo colorido de su diseño.



Los detalles. Este es un juego con mucho corazón en su diseño. Es increíble la cantidad de detalles que se tomaron la molestia de incluir. Por ejemplo, la capilla, en donde al sentarse en una silla de confesionario aparecen fantasmas para llorar sus penas o para atacarte a traición. O que decir de la manera en que los familiares se conportan en ciertos momentos, por ejemplo, cuando tu Devil se echa un soliloquio sólo para apretar un botón y despejar el camino a una nueva área del mapa.

La jugabilidad. Todo reponde a la perfección. Incluso los hechizos, programados como combinaciones de botones muy al estilo de los juegos de pelea. 


En fin, un juego lleno de sorpresas que no alcanzan en una entrada. Este maravilla se ha vuelto de culto y es obligatorio jugarlo una y otra vez mientras siga disponible. Por fortuna lo siguen lanzando para las nuevas consolas, así que no hay excusa para las nuevas generaciones, aunque sería todavía mejor que incluyeran los escenarios que fueron exclusivos para la versión Sega Saturn.

domingo, 4 de noviembre de 2018

1990s: Música en blanco y negro - 2x1

Por JC.
Este artículo tiene como propósito enlistar algunos pares videos en blanco y negro de la década de los noventas, en su gran mayoría. Además, se pretende mostrar la dualidad entre estos dos colores y lo que dichos videos podrían representar en la vida adolescente en los años noventa. Es importante mencionar que algunos de los videos incluidos nunca los vi hasta mucho tiempo después debido a que era difícil que los pasaran en la televisión abierta de aquel tiempo.

El primer par de videos son de R.E.M. Pude verlos gracias a un amigo de mi hermano que nos grababa videos de MTV en VHS

MTV: Para unos era cable, para otros un video VHS que una amigo te grababa.
Éstos son; Drive y Bang and Blame, probablemente mis dos canciones favoritas de R.E.M., las cuales sorpresivamente nunca han sido parte de ninguna colección de sencillos o videos del grupo. El blanco y negro de estos videos es inversamente proporcional a la emoción generada al verlos y disfrutar de estas canciones. Además fueron el inicio de mi gusto por su música.



Los siguientes dos videos son de mis artistas favoritos: Pet Shop Boys; ambos fueron dirigidos por Bruce Weber. Por un lado, Se a Vida é, el cual es uno de mis videos favoritos de la banda, seguramente porque es el primero que vi de ellos. Otra vez, gracias al amigo de mi hermano. Por su parte, Being Boring, que pude ver hasta que fue lanzado Pop Art: The Videos, la videografía completa hasta ese momento.

En Se a Vida é, el contraste es muy interesante. A pesar de ser en blanco y negro, tanto la canción como las personas que aparecen en el video dejan en el espectador una sensación positiva. La canción enfatiza la simpleza de la vida en la juventud, mientras vemos escenas de gente divirtiéndose en un parque acuático en Orlando, Florida.


En cuanto a Being Boring, el hecho de que el video sea en blanco y negro y la temática de la canción son elementos nostálgicos. Por otra parte, el video muestra gente preparándose para una celebración o una fiesta. La letra de la canción es sobre la familia y amigos que ya no están entre nosotros y el video sobre celebrar con los que todavía están aquí.


Los próximos dos videos, Disarm y Stand Inside your Love, son de la banda favorita de mi hermano: The Smashing Pumpkins. Y una vez más su amigo. Él nos grababa los increíbles videos del grandioso Mellon Collie and the Infinite Sadness (ninguno en blanco y negro). Quise agregar estos dos porque cuando mi hermano compró Greatest Hits Video Collection (1991-2000), lo veíamos todo el tiempo. 


Lo curioso aquí es que a ambos nos gustaba mucho la canción Stand Inside your Love y coincidíamos en que no nos encantaba el video. No obstante, al verlo recientemente, opino que no está nada mal. Creo que lo mismo podría aplicar para Disarm.




Finalmente, dos videos que nunca vi en su momento: Afuera y Aquí no es así de Caifanes. Los considero porque el disco El nervio del volcán era muy popular cuando iba a la secundaria, y afortunadamente, mi hermano lo tenía y nos gustaba mucho a los dos (al menos los sencillos y otro par de canciones). 




Mi tema favorito era Miedo, el que hasta la fecha sigue siendo mi predilecto de toda la discografía de Caifanes. Lástima que no se hizo video para esta maravillosa canción. Estos dos videos (y en realidad todos los mencionados aquí) representan el contraste entre la simpleza (o grandeza) que le dan el blanco y el negro a los videos musicales, con el color (o palidez) que puede dar una melodía o ciertas combinaciones de imágenes y sonidos a la vida de una persona.