lunes, 24 de mayo de 2021

1980s: Artefactos de primaria

Ya estamos a mitad del 2021 y con cada día nos alejamos más de nuestros 80s y 90s. Aun así, pese a la lejanía, todavía seguimos haciendo arqueología vivencial y seguimos hallando artefactos interesantes, que con un poco de suerte, activarán más recuerdos dignos de compartir.

Entre los artefactos que en los primeros años de primaria me recetaban 'las hermanitas' de la Fray Pedro de Gante, lo primero que me vienen a la mente son los cuentos que nos hacían comprar para ‘fomentar’ la lectura.
 
La Primaria Fray Pedro de Gante

Cada cierto tiempo nos pedían uno. Aquí entra esa antigua colección A Little Golden Book, que en México editó Novaro (o importó) como Un Pequeño Libro De Oro.


Estas contraportadas dan justo en el blanco.

El primero que tuve fue 5 Centavos para gastar, que por la portada parecía una historia escrita en los 50.
 

El segundo habrá sido La Bella Durmiente, que por el dibujo y la supremacía de Disney (desde entonces) me habrá gustado mucho más.


 
El tercero fue el Marrón Ratón, que hacia parte de una colección llamada Manchitas, de editorial Trillas.

 
Y para hacernos leer y escribir, el Método Onomatopéyico Reducido, que era un manualillo del que no sé por qué recuerdo que también enseñaba a escribir mano escrita.
 
...y estaba la versión reducida
 
Los dibujos distraían, y por eso...
 
Y que monserga era para mí la mano escrita, que nunca se me dio y que quizá fue la razón de mi letra se quedará como desde el principio, tal y como se ve aquí abajo, en un examen que hallé de aquel entonces, de primero o segundo de primaria.
 


Estos exámenes tal vez habrán sido una cuestión exclusiva de la escuela, que como era de paga, mandarían a hacer sus exámenes en imprentas.

En épocas festivas, sobre todo en temporada navideña, las manualidades, de las que recuerdo que varios años nos tocaba hacer ángeles a partir de conos y esferas con caras pintadas.
 
Era algo parecido a esto.


Y para finalizar, el Día del Niño, en los festivales o convivios terminaba el día con el infaltable teatro guiñol,
 
 
que, a no ser que les quiten a los niños el celular antes de la función, no sé si todavía funcionen.
 

En fin, seguramente habrá uno que otro artefacto de las primarias ochenteras que resurja después. Mientras tanto, ¡a hacer más recuerdos!

viernes, 21 de mayo de 2021

1980s: Cepillín

En los ochentas el país todavía producía personajes nacionales para el público infantil. Cantantes, presentadores y cuenta cuentos aparecían en los medios y dejaban recuerdos por aquí y por allá.


Todavía alcancé a escuchar sobre Los Cuentos de Cachirulo,

Y estoy seguro que habré escuchado a una presentadora cantar ‘este es el bizcocho del ocho’ mientras sujetaba una donas a manera de número ocho.  Quizá era lo último que se veía del canal ocho, origen de El Chavo.


A inicios de los 80 recuerdo que nos ponían en la consola un disco de la clásica La Feria De Cepillín, que es tal vez cuando conocí al Cepillín. El disco era un sencillo que de lado B tenía la canción Pillín, dedicada su muñeco de ventrílocuo a imagen y semejanza de él mismo. 

En su historia, el muñeco es mal portado y Cepillín le amenaza con volverlo 'a la maleta'; (una buen argumento disuasivo para usarse con los niños más pingos).


Ese es mi primer encuentro con el Payasito de la tele, el otro apelativo con que se le conoció a Cepillín

Y justo fue en la tele cuando le vi de carne y hueso, por el Canal 5, cuando lo sábados por la mañana pusieron un programa llamado Una Sonrisa con Cepillín (1987). Desgraciadamente parece que no hay memoria de ese programa, que por otro lado habrá durado poco. Lo que si hay son videos de otro programa de los 70 llamado El Show de Cepillín.


Fuera de sus propios programas, me lo topé como participante en un programa de mediados de los ochenta llamado Esta Noche se Improvisa, reventando con facilidad a los demás participantes. O tal vez fue en una sección de XETU, donde habría nacido la dinámica de ese concurso.

Y por supuesto en comerciales,


A finales de los 80, me tocó el hallazgo ya comentado de una serie de discos LPs entre los que había una cantidad sorprendente de Cepillín. Entre los discos había temas clásicos como Un Día Con Mamá,


En El Bosque De La China,

Pero también había cosas de ver para creer, como un LP con un diseño que parodiaba el cartel de la película Saturday Night Fever (1977) y con una canción llamada El Baile De Cepillín, que es una versión cepillada del tema homónimo.


Lo raro es que no recuerdo haber encontrado entre tanto disco la canción que me pongo cada vez que hago mi entrada triunfal en la Arena Coliseo, El Pingo Colorado.

A Cepillín me lo encontraba muy intermitentemente. Quizá por eso es que, aunque es parte de mis ochenta, no era un tema de conversación muy común en la escuela o entre los cuates. Además, su abrupta salida de los medios lo ocultó de nuestro radar por décadas. Al parecer, su amplia popularidad en los 70 y 80 causó muchas ‘inconformidades’ en Televisa hasta que lo vetaron.

https://popfm.com.mx/cuando-cepillin-y-hulk-se-encontraron

Pero es inegable su relevancia a través de los años, tanto que hoy La Feria de Cepillín hace parte del repertorio que se escucha en las fiestas de cumpleaños (me consta), junto al infaltable reguetón y la banda. Y qué decir del ‘La-Feria-De-Cepillín’ challenge:


Hasta antes de su reciente desaparición, estaba muy activo en su canal de YouTube, Cepíllín TV, que al parecer seguirá adelante. Qué bueno, porque vale la pena no olvidar a otro gran producto de nuestros 80s.