sábado, 17 de octubre de 2020

1980s-1990s: La Caravana

Hablemos un poco más de comedia, pero esta vez en  TV.

A finales de los 80 ya era consumidor de programas nocturnos de TV y cuando acababa la barra infantil, los viernes (¿los vienres?) nos ofrecían uno de los programas que más disfrutamos en familia: La Caravana.

La Caravana era otro de los programas que eran rescatables de la vieja IMEVISIÓN. De quizá media hora de duración, La Caravana presentaba sketches con personajes que llegaron a ser entrañables y que muchos recordamos todavía hoy. Los responsables de esos ratos de entretenimiento eran los comediantes Ausencio Cruz y Víctor Trujillo.


Víctor Trujillo en La Caravana fue el creador de personajes como el Charro Amarillo, cantante de corridos urbanos, 

la Beba Galván, una especie de Miss Piggy hipersensual que daba consejos feministas

el Estetoscopio, un personaje de barrio de parlamento muy limitado


y porsupuesto, Brozo, el payaso tenebroso, que vivía de contar versiones guarras de los clásicos infantiles.


Pese a los varios talentos de Víctor Trujillo (como el de ser excelente actor de doblaje), con el tiempo me fui dando cuenta que disfrutaba más de los personajes de Ausencio Cruz, empezando por Valente Campillo, el supermacho que presidía las juntas de esposos maltratados


el inocente Margarito Pérez, eterno participante fracasado del concurso La Pirinola,


y el gran Erreconerrechea, una parodia del siempre presente junior fresa (hoy convertido en mirey), que cuenta sus aventuras en el 'surrealista' mundo de su chofer clasemediero el 'Peter'


Esta preferencia tal vez tenga su razón. No cualquiera puede presumir de haber tenido en su curriculum el haber sido guionista del programa ¿Qué nos pasa?, que pronto nos tocará abordar.


Supongo que esta pareja de comediantes habrá obtenido mucho reconocimiento por La Caravana, pues en 1991 protagonizaron ambos la película Barman y Droguin. No sé si eventualmente fui yo quien la rentó, pero fue una buena elección, ya que era bastante cotorra.


En fin, ya a mediados de los 90 dejó de verse La Caravana. Quizá fue el cambió de dueño de la cadena o tal vez algún desencuentro entre los comediantes. Lo último que recuerdo de sus personajes fue su participación en alguna justa deportiva amenizando las transmisiones  de Los Protagonistas.


Para quienes no tuvieron la fortuna de disfrutar este programa en su momento, sólo queda decir: ¡Lástima, Margarito!